De la
serie, Sustancia de Carros.
Esconder la mano; para la roca
todas las preguntas. Punto, coma, coma, otra, otro, uno. Él diría en la
espalda, dirías tú en la cabeza, en el riñón diría ella, diría yo en los ojos.
Diremos en los tobillos Todos. El estanque tiene hermosas avecillas y hojarasca.
Coma, punto, coma, punto, punta, otro. Diría la roca: besando un neumático;
abrazando la pata de la mesa; de noche en la entrada del hormiguero. Diría.
Decimos roca y corremos.
*
Sí y luego sí. La esfera, el
triángulo y la piedra se escriben con dificultad camino al terror o al hastío.
No como nada ni huelo. El color es tan inexacto y la mesa de los libros. Pido
la cuenta y me voy. No como nada, mi madre lo come todo. El triángulo apunta a
la estrella, te vas a caer de los zapatos. Sí y luego no. Sí.
*
Tengo
este disco rayado que todo se come a su paso: muerte, muerte, muerte, muerte,
muerte, muerte, muerte, muerte, muerte. Y alguien va en esa locomotora, le
brillan los ojos. Vidrio; lodo, filos. Tenía que estar a la hora en punto:
ahora tenemos una interesante discusión: se nos cae el pan de la boca/ lo
escupimos en la cara del tema que nos estorba en esta charla. Quién diría,
somos tan feas flores. Somos flores hermosamente caras. Y el pan se les cae de
la boca aún. A la letra le anuncian la música. Yo me voy por las escaleras.
Arriba se oye que bailan esa violencia.
*
Tin tin tin tan tin: me llamarás
y el árbol será una aguja. Dormido TODO, el espectacular luminoso da de qué
hablar: una bolsa vacía por cabeza, la envoltura del dulce gritándonos MIERDA
DE BORRACHOS: noche del fin del mundo. Aún así creo en mí. Tú me llamaras. No
me llames. La banda de rock tiene los cables que necesito, en el reloj está la
luna hurgando su naricita, lo sabemos. La ropa de espectador va con tus ojos.
El cantante y yo compartimos la goma de mascar. Es una aguja el árbol:
deberíamos estar contando dinero no esos barquitos.
*
La noche
tiene una línea recta en el lomo, y el carro va dando los primeros arañazos:
7:23. A esta velocidad no debería hablar de muerte: tengo el deseo: los ojos se
comen el rayo. Las ropas siguen bajo el brazo: 10,000:23. Todos los automóviles
están malditos, se odian, se besan: escupimos latas vacías: la línea es una
invención, sus dos lados. ¿Es cómoda la almohada? Dame otro beso de abuela.
Estaba soñando, despierto me caigo. 7:26.
Adrián Volt Saénz. Fotógrafo y poeta. Desde 1999 ha participado en actividades
fotográficas y de literatura. Co-fundador de Poeta No-lugar. Fue miembro del
comité organizador de las ediciones I y II de Caracol, Encuentro de Poesía.
Publico Alguna Sociedad Excitada en Proyecto Editorial
Colaboración: Jesús García Mora